29 marzo, 2024

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Netflix: ‘Nuevo Sabor a Cereza’, una indescriptible serie de terror y una rareza de culto

La novela de terror de culto de Odd Grimson, adaptada en forma de miniserie de venganza, suspenso y terror.

La llegada de las plataformas de streaming ha creado una burbuja peligrosa de contenido audiovisual que aparece tempestivamente cada semana y se va acorde a su llegada. La acumulación tiene consecuencias inesperadas, desde la repetición de esquemas, valores de producción miméticos, horas de relleno y explotación de marcas conocidas hasta su drenaje completo. Pero de vez en cuando, en Netflix aparecen series como ‘Nuevo Sabor a cereza’ (Brand New Cherry Flavor, 2021).

La serie limitada de ocho episodios estrenada el 13 de agosto, ha sido escrita y producida por el creador de ‘Channel Zero’ Nick Antosca, no son perfectos. El desarrollo de la historia tiene alguna descompensación en su estructura y al acabar sientes que algunos pasajes iniciales o del nudo podrían haber sido más desenvueltos para llegar a los puntos clave y ese tiempo podría haberse empleado en un final más generoso en minutos para cerrar algunos cabos sueltos. Pero nunca aburre y en ningún momento esa falta de explicaciones finales juega en su contra. Más bien al contrario.

Serie adaptada a la novela homónima de Todd Grimson pero no en su totalidad literal, ya que solo cubre un tercio de la misma, Se podría deducir en tener espacio para una segunda temporada que parece improbable, por lo radical de la propuesta y por la propia desconfianza de Netflix en el producto, que han enterrado en el fondo de su catálogo.

Puede describirse como una historia de venganza sobrenatural en el mundo sórdido de Los Ángeles, con Hollywood de fondo, pero el diablo está en los detalles y en todos lados, y ese lienzo es demasiado enorme. A muchos les bastaría saber que es la esperada nueva miniserie del creador de la monumental ‘Channel Zero’.

Nick Antosca se consagra como una de las voces más libres e inclasificables del terror actual desarrollando junto a Lenore Zion un relato amoral que podría servir como enema de los fantasmas del MeToo y la luchas de poder en el mundo del cine. Nick incluye un catálogo impío de body horror y genera climas a tal punto que te vas a encontrar con lo mas extraño en la plataforma en este año. Una miniserie que podría ser la temporada cinco de ‘Channel Zero’ si esta hubiera tomado una vía de madurez menos inaccesible.

La protagonista, Liza Nova, una directora novel, busca recuperar su película de las manos de un productor que la ha engañado y ha decidido no seguir adelante con su proyecto cuando esta no quiere ceder a la extorsión que le plantea. Esto desencadena una serie de luchas que centran el grueso del argumento de la serie.

La lucha va escalando como si fuera una especie de versión de ‘Maleficio’ de Stephen King en el mundo de ‘Vivir rodando’ de Tom DiCillio a la que se le hubiera aplicado una estética de cine indie y noir de los 90, en la que prima la comedia negra y el humor absurdo, pero también en la que la violencia y el terror suceden muy en serio. ‘Nuevo Sabor a cereza’ podría ser también un cómic de Vértigo, con ese realismo mágico oscuro urbano de Neil Gaiman en el que cualquier cosa puede suceder pero en la que los diálogos fluyen sobre la acción o los sustos.

Pero no es fácil catalogarla. Quizás por esa trabajada, e inusual, gama de grises no acaba de sorprender ver cómo la protagonista tiene escenas bizarras que evoca los mejores momentos de los cómics de Charles Burns o las películas de terror venéreo de David Cronenberg.

Es la clásica serie de ver para creer. Es un cliché, pero muchos la odiarán y otros la amarán. Pero ojo, a diferencia de ‘American Horror Story’, no busca la provocación de forma mecánica, sino que todo entra dentro de la compleja tortura a la que se ve expuesta Liza Nova, en pleno purgatorio de sus propios pecados al estilo del guionista encerrado en un hotel infernal de ‘Barton Fink’. Quizás es en ese grupo de películas de lugares asfixiantes que reflejan los propios demonios, es en donde mejor podría encajar la nueva serie de Netflix.

El reparto de ‘Nuevo Sabor a cereza’ es fantástico, con secundarios como Manny Jacinto o Patrick Fischler que refuerza la presencia de Lynch en cada plano y una villana de lujo como Catherine Keener, que no por casualidad fue musa de Di Cillio en los 90. Pero es imposible no destacar el memorable trabajo de Rosa Salazar como Liza Nova, la antiheroína de la serie, un personaje oscuro con el que no es difícil empatizar a pesar de las consecuencias son inestimables. Acompañando todo con una banda sonora de primer nivel que rescata un buen puñado de temas poco conocidos u olvidados, de artistas como Primus a Concrete Blonde, Os Mutantes e incluso Phil Collins.

Tratar de entender esta serie como una obra de prestigio es en vano, para disfrutar de su apuesta por la actitud, su desvergonzada condescendencia por la explotación sin desatender la historia y su cuidado desarrollo de personajes. ‘Nuevo sabor a cereza’ es toda una experiencia, tan sólida como ruidosa, quizá no para todos los públicos pero sí para los paladares hambrientos de rarezas que aparecen de la nada y no se parecen a los dictados transcritos por la dictadura del algoritmo. Un viaje lisérgico, grimoso que muestra que las fronteras al género del terror están por trazar.

Fuente J.Loser/Spinof