Steve Morse, quien había sido desde 1994 el guitarrista de Deep Purple, aseguró que le es imposible comprometerse con los planes futuros de Deep Purple y ha abandonado la banda para focalizarse en cuidar a su esposa Janine, que lucha contra el cáncer. El propio Steve le dijo a sus compañeros de la banda que “simplemente tengo que estar ahí con ella“.
Después de que hace unos meses el propio guitarrista dijese que se iba a tomar un tiempo con el grupo para volver cuando su mujer estuviese mejor (por lo cual le había sustituido de gira el guitarrista Simon McBride de origen irlandés), finalmente ha tomado esta decisión.
Actualmente Deep Purple se encuentra de gira en Europa y ya desde abril no cuenta con Morse entre sus filas, aunque el mismo guitarrista se había encargado de aclarar que su ausencia sería momentánea. “El otoño (boreal) pasado, abandoné repentinamente las sesiones compositivas de Purple en Alemania porque mi esposa estaba teniendo una crisis médica real“, explicó Morse. “Ambos extrañamos estar en los shows, pero simplemente no podía comprometerme con giras largas o lejanas, ya que las cosas pueden cambiar rápidamente en casa. Sugerí contratar a un guitarrista sustituto, con la esperanza de que pudiéramos encontrar la milagrosa cura del cáncer de la que tanto hemos oído hablar“.
Ahora, Morse aseguró que el show de Purple en el Rock Legends Cruise de Florida fue su último concierto junto al grupo. “Deseo agradecer a todos los oyentes que apoyaron tan fuertemente la música en vivo y convirtieron cada show en una experiencia emocionante y estruendosa. Voy a extrañar a todos en la banda y en el equipo, pero ser el ayudante y defensor de Janine ha cambiado mi perspectiva en muchos puntos clave de mi vida”.
En un comunicado muy extenso de la banda en el que incluye las palabras de sus miembros ante este acontecimiento, Deep Purple ha querido remarcar que la decisión ha sido por ese motivo. El resto de los integrantes agradecieron a Morse por sus años de militancia en el grupo.
“En circunstancias como estas, normalmente es difícil encontrar las palabras adecuadas“, señaló Ian Gillan. “Pero no en el caso de Steve Morse; sé lo que quiero decir. Él provenía de un entorno diferente al resto de nosotros en Deep Purple y, sin embargo, su genio musical ha sido de alguna manera compatible y jugó un papel importante en la nueva dirección que adoptó el grupo cuando se unió e hizo su primer álbum con nosotros en 1996… Desde el momento en que Steve se unió a Purple, fue obvio que podía abrirnos nuevas posibilidades musicales. Como la mayoría de los grandes músicos creativos, tiene la capacidad de generar ideas musicales en las que nadie más ha pensado“.
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