Una casa de subastas francesa determinó que un cuadro que pertenecía a una familia desde 1900 y colgaba en una pared detrás de una puerta sin haber sido hasta ahora investigada su autoría, fue pintado por el artista flamenco Pieter Brueghel el Joven (1564-1637-38).
Los propietarios lo sospechaban -de hecho llevaban un siglo llamándola «El Brueghel»– pero no se preocuparon por dilucidar el misterio, acaso por temor al desencanto de ver derrumbada su fantasía. Sin embargo, la decisión de sacar a subasta el cuadro impulsó la investigación que en una doble operación confirmó al artista flamenco como autor y disparó su cotización millonaria, según señala la revista especializada The Art Newspaper.
La obra, que será subastada en el hotel Drouot de París el 28 de marzo por la firma Daguerre -la misma que llevó a cabo el estudio que derivó en el hallazgo de su autor-, fue calificada por los especialistas como «excepcional» y ha sido valorada en 800.000 euros (unos 855.000 dólares).
La pieza mide 112 cm. de alto y 184 cm. de ancho, y es la mayor composición conocida del pintor. Titulada «El abogado del pueblo», está fechada entre 1615 y 1617 y es una composición original de Brueghel que representa una escena caótica con los aldeanos haciendo fila en las oficinas del abogado, muchos de ellos con regalos que incluyen huevos y aves de corral.
En noviembre, la pieza se llevó a los autentificadores parisinos Cabinet Turquin, en París, donde tanto el fundador Éric Turquin como el experto en arte Stéphane Pinta reconocieron la maestría de Brueghel.
Además, Drouot envió el cuadro a Alemania, donde el especialista en el pintor Klaus Ertz confirmó posteriormente la autentificación en diciembre.
Las obras de Pieter Brueghel
Pieter Brueghel el Joven, nacido en Bruselas, era el hijo mayor del pintor renacentista Pieter Brueghel el Viejo. Su hermano menor, Jan Brueghel el Joven, también fue pintor.
Brueghel el Joven pintó paisajes, temas religiosos, incluidas varias representaciones del infierno, escenas de pueblos y flores, pero también fue un prolífico copiador de las obras más populares de su padre.
Sus copias de «Paisaje invernal con patinadores y trampa para pájaros» (1565) -de las que 10 están firmadas y 4 fechadas- son un buen ejemplo.
Varias versiones de «El abogado del pueblo» se conservan actualmente en prestigiosas colecciones de museos como el de Historia Alemana de Berlín, el Real de Bellas Artes de Amberes o el Bonnefantenmuseum de Maastricht.
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